Este libro explora con lucidez, ironía y una aspereza no exenta de humor, los recursos -y discursos- con que hemos intentado evacuar el enigma de nuestra existencia. Dios el primero, pero también todas las doctrinas críticas que le han seguido. El autor aspira a hablar desde ese lugar desde donde aún se puede contemplar toda la riqueza y ambigüedad de las cosas. Antes, pues, de esa terrible esclusa que separa la corriente de lo bueno y de lo malo, allí donde «las palabras no hacen aún sombra a las cosas, ni se encarnan en dioses menores que tanto abundaron en el siglo pasado: en ideologías, semiologías, subversiones, desconstrucciones y otros fósiles que no conducen ya a ninguna parte».

En este libro, Xavier Rubert de Ventós trata de cumplir el propósito enunciado en Oficio de Semana Santa (1979), el propósito de explicar sólo aquello que experimenta a flor de piel, de hablar desvergonzadamente de sus vergüenzas, cándidamente de sus manías y pasiones, de envolver mentiras y verdades hasta convertirlas en inextricables:
«Yo sólo escribo cuando una sensación o idea se hace tan poderosa, incómoda y obsesiva que me veo obligado a neutralizarla con la escritura: y los propios límites del lenguaje se transforman entonces en mis mejores aliados. El aire formulario que adquiere todo lo formulado me ayuda a convencerme de que la cosa no era para tanto. Así, voy conjurando y ahuyentando con la escritura los demonios que me perturban (...). Formular una pena es una de las maneras de banalizarla, de quitarle filo, incluso de anularla. Descritas y formuladas, las sensaciones se convierten en realidades objetivas que ya puedo mirar como ajenas a mí mismo. Se trata, como se ve, de una cura catártica, o mejor todavía, homeopática: simila similibus curantur.»
«Cuesta pensar con naturalidad y seguridad: superar los vértigos, dejar avanzar el pensamiento con la confianza de que hallará lo que busca; la misma confianza con que el rey se sienta sin mirar atrás, seguro de que va a encontrar la silla que alguien le habrá acercado.» «Un entorno razonablemente sensual, e incluso una relativa gimnasia sexual, ayudan al pensamiento: lo que éste no admite es ninguna atadura sentimental. Al cerebro no le roba sino que le ahorra energía el amueblamiento sensual y el erotismo profiláctico, es decir, todo lo que apacigua a un cuerpo que debe funcionar al mismo tiempo como su fuente de energías y su instrumento. El pensamiento nos permite, pues, aquello que nos estabiliza pero no lo que nos mobiliza; tolera lo que nos gratifica pero no lo que nos atrae. Más que en la represión, el pensamiento y la cultura se basan en la frialdad, se levantan sobre el egoísmo y se mantienen a fuerza de narcisismo. Nos perdonan quizás los placeres, pero nunca los amores.»

• Xavier Rubert de Ventós (Barcelona, 1939) es filósofo, profesor y escritor. Catedrático de Estética en la Escuela de Arquitectura de Barcelona, Santayana Fellow en la Universidad de Harvard, ha fundado el New York Institute for the Humanities y el premio europeo Mies van der Rohe. Además, ha sido parlamentario en el Congreso Español y en el Parlamento Europeo. Es autor de una extensa obra sobre filosofía, ética y estética, entre la cual destacan El arte ensimismado, Teoría de la sensibilidad, La estética y sus herejías (Premio Anagrama de Ensayo), De la modernidad, Por qué filosofía, Ética sin atributos y Crítica de la modernidad. En los últimos años también ha hecho una reflexión crítica sobre temas políticos en El laberinto de la hispanidad, El cortesano y su fantasma o Catalunya: de la identitat a la independència. Ha sido galardonado con la Lletra d'Or de la literatura catalana, con la Creu de Sant Jordi y con los premios Anagrama de Ensayo, Josep Pla y Espejo de España. Gran parte de su obra ha sido traducida al inglés, al alemán, al italiano, al portugués y al húngaro.

• ISBN: 9788429736595 / 842973659X
• Estado: Bueno.
• Ilustrado en blanco y negro.

Xavier Rubert de Ventós (Barcelona, 1939-2023) fue catedrático de Estética de la Escuela de Arquitectura de Barcelona, así como fundador de la cátedra Barcelona - Nueva York y del New York Institute for the Humanities. Ha sido profesor visitante en diversas ciudades americanas y también diputado en los parlamentos de Madrid y Estrasburgo. Entre sus numerosos libros, hay que destacar, además de El arte ensimismado, Teoría de la sensibilidad, Moral y nueva cultura, La estética y sus herejías, Utopías de la sensualidad y métodos del sentido, Ensayos sobre el desorden, De la Modernidad, Metopías, Europa y otros ensayos y El laberinto de la hispanidad.
El arte ensimismado, el primer libro del autor, es un análisis crítico del arte de vanguardia en el que se descubría por primera vez el denominador común a que responden tanto la pintura informal como la música electrónica, el «nouveau roman», la arquitectura funcional, el «nuevo cine» e incluso la filosofía existencial. Como reconoce el autor en el prólogo de la edición de 1978, en este libro se hallan in nuce —menos elaborados que en otras partes, pero también menos disimulados—los temas y preocupaciones que caracterizan toda su obra posterior: su interés por las formas más que por la Forma, por los fenómenos híbridos más que por las entidades de una pieza, por la erosión de las reglas de la Comunicación canónica y el orden figurativo del Poder, más que por la imposición de un Orden Nuevo.

11 pp. Separata facticia de Revista de Occidente. Año 1. Madrid, 1980.